En Intimo con Julieta...

¿Piensas que evolucionaste de lo alternativo al mainstream?

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No lo veo para nada como un antes ni un después. Lo veo precisamente como un proceso. En el "Unplugged", hacer canciones de todos mis discos es una manera de unificarlo todo. Y para mí siempre ha tenido sentido. Pero lo más importante es que para mí tiene congruencia. La dirección que he tomado es natural y es lo que se me ocurre.

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Con tu "Unplugged", ¿querías lograr un puente entre la música muy mexicana y lo más universal?

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A la hora de escoger la instrumentación sí me puse a escuchar música de banda. Y lo que me gustó fue rescatar los instrumentos que me parecían interesantes, por ejemplo, la tuba. Se usa en la banda, pero es como muy salvaje. Mi personalidad no me da como esa fuerza. La tuba sola arma la fiesta. Cada instrumento tiene su personalidad, pero no quería hacer algo gigante. Quería que cada instrumento tenga como su peso y que aportara de su lado. También hay influencias de la música balcánica, en la música de los vientos; de la música brasileña. Me puse a escuchar de todo pensando en las texturas. Y no pensaba tanto en términos de lo mexicano, sino lo que me atraía. No quería esa percusión por ejemplo, "acá tocan una percusión más caribeña". Quería algo que tuviera un sonido más profundo. Pensé en el bombo y el guero, que tienen este sonido profundo y seco. Traje una percusionista argentina que se llama Mariana Bará, y me encantó la instrumentación que tenía. Se ponía conchas en los pies. Y cada persona trajo su rollo.

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Lo padre que tiene el concepto del "Unplugged" es que le puedes dar la lectura que quieras. Puedes hacer algo muy desnudo. Y a mi lo que se me hizo bonito es que lo tomé como un reto. Cuando pensé en el "Unplugged" primero, nunca se me ocurrió hacer los arreglos. Y después dije "¿Por qué?, lo lógico es que haga los arreglos yo". Y para mí abrió una puerta en mi cabeza que no se me había ocurrido. Para mí el "Unplugged" era como una búsqueda. Quería cambiar el formato, cambiar la instrumentación, hacer algo diferente.

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Háblame un poco de las canciones nuevas

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"El presente" es el sencillo y me inspiré en una norteña, pero después tiene un lado de nostalgia. Luego en "Ilusión", que canté con Marisa Monte, estamos hablando de la ilusión misma, y de como mujeres y hombres tenemos que cortejar la ilusión, que es una parte muy importante de estar vivo. Y luego está "Mira la vida", porque alguien muy cercano a mí va a tener un bebé, y vi como empieza a transformar su cuerpo, su vida, y quería hacer una canción que habla de la sensación de cambio, de tener un ser entrando a tu vida. No es solo súper sweet, sino que también hay un proceso de cambio que como mujer es una cosa fuertísima. Y luego está "Algún día", que en esa canción Gustavo Santaolalla tocó el banjo. Habla de querer cuidar a una persona muy cercana, una hermana, o alguien por el que sientes cierta protección.

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Algo que me gusta de tus canciones es que son muy directas y coloquiales. Cuando escribes, ¿lo haces conscientemente como si estuvieras hablando?

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Igual me gusta encontrarle el ritmo a las cosas que digo, pero sí, en general me gusta pensar que lo estoy diciendo como si estuviera hablando.

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¿Cuando empieza la gira?

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Salimos de gira en junio. Ahora voy a empezar a ensayar una versión unplugged del “Unplugged” Me llevo todo el ensemble. De repente pensé en adaptarlo y me pregunté "¿cómo lo puedo adaptar?, y pensé, no, pues lo quiero presentar así. Nunca he ido con un grupo tan grande, pero eso fue lo que preparé y así lo escribí, para esa instrumentación.A grandes rasgos vamos a hacer de julio a diciembre, y vamos a estar en Boston, Nueva York, en varios lugares en Estados Unidos, México, Sudamérica, España, Suiza, Inglaterra.

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¿Cuántos son?

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Son un cuarteto de cuerdas, un cuarteto de vientos, una chica pianista, un chico que toca un poco de todo, desde banjo hasta serrucho. ¡14 personas! Lo que me gustaba del “Unplugged” era cambiar un poco el formato. Me sentía un poco atrapada por ese formato de guitarra, bajo, drums. Hice los arreglos, y en las cuerdas me ayudó [el chelista] Jacques Morelenbaum a hacer la orquestación. Las cuerdas, especialmente, quedaron como, “¡wow!”. Él estuvo de co productor mío.

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¿Es otra sensibilidad para tí, no?

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A mí lo que más me encantó de Jacques fue lo que hizo con las cuerdas, fue alucinante. Trabajé los arreglos de las canciones en su totalidad, y él a la hora de hacer los arreglos de cuerdas los orquestó. Fue muy emocionante hacerlo porque fue como una audacia. Nunca había producido un disco mío y fue hacer todo el proceso, desde escoger los músicos y los invitados. Por suerte me aceptaron todos los que invite. En el caso de Marisa Monte, no sabía si me iba aceptar. La conocía de fan, pero no tenía ningún trato con ella. Todos los demas los conocía desde antes, como Gustavo Santaolalla. Y fue súper bonito que me aceptó. Todos me dijeron que sí. Toda la experiencia fue muy positiva.

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¿Cómo es tu relación con Internet y la música?

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Soy más de Internet que nada. Especialmente ahora que estuve en México, bajaba mucha música de emusic, que es una página de música independiente. Escuchas mucha música en los blogs, en myspace. Eso es lo padre de myspace. Hay muchos chavitos que me escriben y me dicen, "oye escucha", y los escucho. Pero es padre tener esa posibilidad. Creo que antes ni existía ese acercamiento con los músicos.

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Tocas acordeones Gabanelli, y tienes uno en tu sitio de Internet. ¿Desde cuando?

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Fue por Los Tigres del Norte que empecé a tocar el Gabanelli. Me regalaron uno. Cuando Los Tigres me invitaron a tocar en los Grammys, primero fue super emocionante. Me dicen "¿qué te vas a poner?" Y les digo un vestido azul y blah, blah, blah. Y me dicen "aquí tienes algo para combinar con el vestido", y me prestaron un Gabanelli precioso, con piedras, una cosa hermosa. Al final del ensayo me dicen, "Julieta, ¿te gusta el Gabanelli?" y digo, "sí está precioso", y dijeron, "pues es un regalo de Los Tigres". Tenía un acordeón Hoffner, pero han cambiado el sonido.

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¿Gabanelli haría un "Julieta"?

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Este me lo hicieron custom made porque yo necesitaba un acordeón que no fuera tan pesado. Pero no sé, capaz que el que me hicieron estuvo genial. Fue como un acordeón que se me acomodó.

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Tu imagen es cool, pero nada glamorosa. ¿Haz considerado cambiar tu imagen?

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Me pongo lo que me gusta y cuando salgo de gira también. Tampoco me gusta que me digan qué hacer, como teñirme el pelo de rojo. No. Para darte un ejemplo, cuando hicimos el "Unplugged", los de MTV hicieron como un making off todo el tiempo. Y también en el show. El único momento en que hubo drama fue cuando estaba en el ensayo y me pusieron un rack de vestidos y me puse súper tensa. Les dije, "¡estoy ensayando. No tengo tiempo para que me traigan un montón de vestidos!". Hasta el último momento estoy pensando, especialmente en este disco, de que todo el mundo este haciendo lo que tiene que hacer. Me absorbo mucho en el lado musical. Me gustaría ser como más estética, aunque eso lo hago en los videos. Soy muy mala para verme objetivamente. Intenté en un momento trabajar con vestuaristas, y era, "oh, tu deberías intentar ponerte esto", y esa no soy yo.